"Otra reunión de mi grupete de música. Esta vez aprovechando lo que nos tocó en un décimo compartido, tiramos de marisco, centollos, ñoclas, langostinos... , con lo que yo sólo aporté este entrante y unos canapés de aguacate y surimi que publicaré enseguida.
Este año voy con retraso en las entradas, pero he decidido dejar a un lado las prisas y el agobio y he pensado que si este blog es un reflejo de mi vida, las fechas de publicación también lo serán... . Me niego a que este "reducto" de libertad se vea envuelto en parte de mis obligaciones diarias, nunca me olvido de él, ni de los vuestros, pero por la razón que sea, últimamente me cuesta encontrar un hueco para dedicarlo a este menester.
Así fue este entrante, hecho con un poco de prisa, con lo que tenía por casa, pero dedicado a una parte de mi vida que recuerdo con muchísimo cariño, los veo entrar en mi casa y me cambian la cara. Comemos, reímos, reñimos (si no, no seríamos nosotros), alguna que otra copa, volvemos a reír y quedamos para la próxima.
Ya estoy esperando que llegue!!."
Las cantidades que pongo son un poco a ojo, ya que dependerán del gusto de cada uno.
La elaboración no tiene nada de complicado, simplemente mezclamos todos los ingredientes y los colocamos sobre las planchas de pan Bimbo que previamente habremos aplastado un poco con el rodillo.
Enrollamos, envolvemos en papel de aluminio y a la nevera un rato para que endurezca y tome forma.
A la hora de servir, untamos con un poco de mayonesa y espolvoreamos con el huevo cocido desmigado. Podemos colocar unas gambas por encima y acompañar con lechuga.
"CAPRICHO DE DIOSES... la compañía sin dudarlo... . Ojalá nunca se terminen nuestras ganas de juntarnos... , os quiero mucho!."