Los griegos clásicos decían que algunos lugares eran sagrados en sí mismos, sitios donde se abría una especie de pasillo invisible que comunicaba con la divinidad y el mundo de lo eterno. Eran esos lugares, llamados témenos, los que escogían para alzar sus templos, recintos que separaban de forma evidente y precisa las áreas sagradas de las consideradas simplemente profanas.
Si le damos un sentido laico al término, podríamos definir los témenos como sitios mágicos, lugares que parecen conservar la estela de un momento, una imagen, parajes donde tiempo atrás sucedió algo que nos emociona, sitios retratados por personas importantes o lugares donde se escribió la historia.
Si ahondamos dentro de nosotros mismos, seguro que encontramos nuestros témenos particulares, sitios donde el olor, el paisaje o sus gentes, nos transportan a tiempos atrás que sólo recordarlos provocan en nuestro gesto una entrañable sonrisa.
Os propongo un ejercicio mental muy saludable: vamos a recordar esos lugares y esos momentos. Empiezo yo, éstos son sólo algunos de mis témenos:
- El patio de mi colegio. Estamos en época de escolarizar a los más pequeños de la casa, por este tema, hace unos días estuve en mi colegio donde hoy puedo decir, que tengo la suerte de llevar a mi pequeñín. Allí encontré a una de mis profesoras a la que tengo mucho cariño, la hermana Sor Aurora, y allí, hablando con ella, eché la vista a un lado y me ví con el uniforme corriendo por aquel patio, ahora será mi hijo quien lo haga y dentro de unos años mi pequeñina, ojalá sean tan felices allí como lo fue su madre... .
- Mi pueblo, sus tierras, su paisaje, sus costumbres, cada vez que voy vuelvo a mi infancia.
- La Escuela de Empresariales, la cafetería de Miguel y el Musaeum, entrar en estos sitios me remueve, las notas en los tablones, los interminables cafés, bullicio, amigas. Algunas de ellas me acompañan ya de por vida.
- El aeropuerto... un sinfín de sensaciones... quién no?
- La plaza del Marqués.
- Madrid, cualquiera de sus rincones.
Según escribo, van apareciendo más y más témenos, algunos indescriptibles, yo dejo aquí el testigo por si alguien se anima...
La calle cortada donde vivia mi abuela en León y jugabamos todos los veranos hasta las mil..., el patio de casa de mis padres donde vivimos una infancia y adolescencia parada en el tiempo en un micro mundo estupendo, la escalera 15 de la playa de San Lorenzo con mi madre, mi prima Patri y mi tia Carmen, el merendero de Mareo ese que está justo donde la señal de la ronda de Mieres, la casa de mama Lucia (que ha cambiado pero sigue siendo un sitio mágico...), la cuesta del Cholo y alrededores con mi hermana del alma, la cafeteria de Empresariales con ese vinin "estupendo", su hall maravilloso; los Fresno y la Avda. Schull por donde daba un estupendo rodeo para ir a mi casa para cotillear y comentar con mis amigas, los cafés en el Musaeun para hablar de cosas de chicas, El Escondite un bar de Cimadevilla que deseo con toda mi alma disfrutar este verano con una ronda de golpes de Tequila con las hermanas Alonso y si convenzo a mi amiga Julia ya sería ...La estación de los Alsas de Gijón y Cáceres con todos los sentimientos a flor de piel... Los praos de los alrededores de Gijón con sus fiestas y la sidra... NO PUEDO SEGUIR PORQUE ESTOY LLORANDO Y NO VEO LO QUE ESCRIBO. (sandra)
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Mi lugar mágico es la playa del Cuevas del Mar en Nueva de Llanes.... Iba con mi familia todos los veranos desde muy pequeña hasta los 10 o 12 años. Mi abuela me llevaba a bañarme todos los días, hiciera frio o calor porque el agua del mar me venia genial para unos problemas respiratorios que tenia. Siempre me esperaba en la orilla con un bañador seco para que no cogiera frio, jeje... Además como no podía comer helados, me compraban sólo el cucurucho y me ponian dentro Petitsuise y yo era la mas feliz del mundo, mira tu...
ResponderEliminarEs maravilloso indagar en uno mismo, verdad? Somos muy afortunados...
ResponderEliminarLore, tengo que conocer esa playa.
Sandra, cómo iban a faltar tus amigos del patio? Y anda, sonríe un poco que no puse el post para verte llorar.
Covadonga, una amiga que está un poco lejos, exactamente en la Universidad de UCLA (L.A.)me envía por email su témeno: "Una cala del pueblo donde iba de vacaciones de niña".
ResponderEliminar"Mi habitación" sin duda es uno de mis témenos preferidos, me veo cantando delante del espejo, en la ventana hablando con mi vecina de en frente, en mi pupitre haciendo deberes junto a mi hermanita, colocando mis muñecos en mi saco de tela para dormir con todos ellos...
ResponderEliminarUna Cala de Gijón.
El Labertinto del Colegio.
Casablanca en mi pueblo.
La escalera 15 de la playa,en la que pasaba horas y horas con mis amigas hasta que las gaviotas nos decían que era hora de irse a la cuesta del Cholo a tomar unas aceitunas y una botella de sidra...
El Gepetto del Barrio de la Arena los domingos antes del cine...
Me podría pasar toda la noche enumerando cada uno de mis Témenos...
Gracias Hermanita, por hacerme recordar que siempre he sido muy feliz...
Sandra!!!
ResponderEliminarMe hará ilusión recordar en tiempo real unos de tus témenos...Así es que, la primera ronda de golpes de Tequila ya está asegurada en el Escondite..
Mi barrio,el barrio de Llopis, el barrio donde crecí, donde conocí a los que hoy todavía son mis amigos, cada vez que paso por alli nos recuerdo tantas horas jugando en la plazoleta, sentados en el banco viendo pasar a unos y a otros y contándonos nuestras batallitas, que todavía hoy cuando nos juntamos en casa de alguno de nosotros a tomar unas copas recordamos y disfrutamos juntos. El Rodeo, al pasear por allí lo recuerdo como era entonces, con sus árboles, sus verdes, nuestros interminables partidos de fútbol allí después de buscar rivales por los alrededores para jugar aquellos "fíos".La Plaza Mayor donde nos reuníamos toda una generación a hacer los botellones y recorrer de grupo en grupo saludando y comentando cómo fué la semana en cada uno de ellos y donde tenías relación con todo el mundo por qué sabías donde encontrar a cada uno. El piso de mi abuela en El Perú; cada vez que lo veo me recuerda a ella a todos los momentos tan especiales que viví allí, a lo mucho que la quiero, a lo mucho que la recuerdo desde que se marchó sin despedirse ... Después de tomar aire, seguiré con alguno más, pero siempre se me llenan los ojos de lágrimas cada vez que la recuerdo....
ResponderEliminarLos campos de fútbol de Pinilla, cada vez que llevo a Dani allí, me veo con la camiseta roja del Dioce corriendo, golpeando el balón, aquellos vestuarios donde reímos y lloramos, y se lo explico que ahí jugaba papá y que algún día quiero que tú también lo hagas, y ese día seré de las personas más felices que haya en la Tierra.Por supuesto la Facultad d Empresariales, donde pasé 3 años maravillosos y donde conocí a muchos AMIGOS DE VERDAD con los cuales conservo esa amistad tan especial, y a mucha gente que he dejado de ver pero que merecían de verdad la pena.El parque que hay en Antonio Hurtado, donde he pasado muchísimas horas (durante varios veranos todas las noches) con gente a la que he querido mucho, con gente que me ha defraudado muchísimo, que no merecía la pena, en absoluto, pero que en esos momentos eran lo mejor que tenía. Y tantos otros sitios que me recuerdan cosas buenas y mágicas, pero que no tendría página suficiente y además ya he despertado muchas sensaciones en mí, que junto a las que ya tengo a flor de piel, van a hacer que el sueño tarde mucho hoy en vencerme.Las contaré a quién esté interesad@ en saberlas .... (juanma)
Sin ninguna duda nuestra casa, con mis tres pequeñajos es mi témeno preferido, a partir de este punto gira ,y girará toda mi vida.
ResponderEliminarIdem
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